¿Còmo afrontar la muerte de un ser querido?

1. Permítete sentir

El duelo suele provocar multitud de emociones y todas están bien. Es habitual sentir tristeza, rabia, confusión, culpa y ninguna de ellas es inadecuada. Es fundamental permitirte sentir estas emociones en lugar de reprimirlas. Algo básico en los duelos es entender que aquello que no expresamos se nos queda dentro. Esto lo único que hará será que en un momento posterior todo aquello que hayamos encerrado dentro nuestro salga sin control ninguno, en el momento más inesperado y posiblemente ni si quiera lo asociemos con la pérdida del pasado.

Cada persona vive el duelo de manera diferente; no hay una forma correcta o incorrecta de sentir, todo está bien y es adecuado si es lo que la persona necesita. Reconocer y aceptar tus emociones es un paso crucial en el proceso de superación.

2. Busca apoyo

Hablar con amigos, familiares o un profesional puede proporcionar un espacio seguro para expresar tus sentimientos. A veces nuestra tendencia es a encerrarnos en casa y en un primer momento, la verdad, es totalmente entendible. Darnos ese espacio es sin duda, sano. Pero a la vez tratemos de seguir en contacto con nuestra gente ya no solo para descargar nuestras emociones sino para contemplar que la vida continua, que el resto de la gente está aquí y que tu vida debe de seguir.

3. Crea rituales de despedida

Hay muchas personas que por sus creencias o ideales ya suelen realizar rituales de despedida para sus seres queridos. No es necesario ser de una religión o ideología para ello. Hacer un acto de despedida puede ser importante para tomar conciencia de la situación y “dejar partir” a esa persona. Una carta, un viaje a algún sitio representativo o cualquier otra cosa que se te ocurra puede ayudarte en el proceso de superación de la perdida.

4. Cuida de ti mismo

El duelo puede ser agotador tanto emocional como físicamente. Es importante cuidar de tu salud durante este tiempo. Hacer deporte (incluso pasear), comer lo mejor posible y descansar bien son cosas esenciales para poder afrontar estos momentos.

5. Sé paciente contigo mismo

No hay un tiempo para el duelo. Si lees libros o incluso manuales de psicología veras que determinan un numero de meses para decidir si se ha superado un duelo o no, pero la realidad es que no es tan estricto como se indica. Hay personas que en unas pocas semanas están bien y gente que tarda un año. Para mi y por mi experiencia en terapia el duelo se va moviendo mucho. Hay momentos en los que uno esta bastante bien y de repente le da el “bajón”, puede ser por una fecha determinada, una foto que se ve, un olor que recuerda.

Es completamente normal subir y bajar emocionalmente durante un duelo y suele ser bastante coherente que haya reminiscencias de duelo durante un año por la idea de “hace un año en esta fecha…”. Tener paciencia con nosotros, respetar nuestros tiempos y ser compasivos con nuestra forma de afrontar la perdida es esencial. No importa lo que otros te digan, cada persona es un mundo y debe conocerse bien para darse a si mismo el espacio y tiempo que necesita.

6. Recuerda con amor

Algo que suele ayudar mucho en un momento dado es recordar todas aquellas cosas y recuerdos positivos y bonitos que tenemos con esa persona. Recordar esto es honrar la vida de esa persona y del hermoso impacto que tuvo en nosotr@s. Algo que suelo decir a mis pacientes es; “Podemos machacarnos porque murió a los 20 años o celebrar que pudimos tener a esa persona 20 años con nosotr@s”. Yo misma perdí a los 10 años a dos personas básicas en mi vida (mis padres). ¿Solo los tuve 10 años o, al menos los pude tener esos años? Doy gracias por haberlos conocido y por lo que pudieron aportarme esos años.