¿sufrir por amor?

¿Sufrir por amor?

 

¿Sufrir por amor? Disney ha hecho mucho daño. Ahora en serio, tenemos en la cabeza que cuanto más se sufra más amor hay. Perdonadme que os diga que esto no es correcto. No por sufrir más quiero o me quieren más. No es una cuestión de amarse solo, es una cuestión de amarse bien.

Una premisa importante y básica es: una persona que te ama no te hará sufrir. Esto no significa que no haya problemas en una relación, pero debemos distinguir entre problemas y sufrimiento. Los problemas surgen, se dan en la vida (desempleo, muertes…) pero el hacer sufrir a otra persona por cualquier circunstancia son palabras mayores.

Partiendo de esta sencilla afirmación, si estamos en una relación y sufro por ello, no es mi lugar. Normalmente cuando en una relación hay sufrimiento no es una adecuada relación para ninguno de los miembros de la pareja. La parte que sufre, por el sufrimiento en si y la parte que genera el sufrimiento porque el simple hecho de estar generándolo nos indica que esa persona tampoco es feliz (no voy a meterme en perfiles más psicopatológicos como las psicopatías donde podríamos hacer matices).

Vamos a ver algunas señales que pueden ayudarme a saber si la relación en la que estoy debe finalizar:

  • Diariamente tenéis discusiones continuas, en muchas ocasiones por cosas triviales del día a día.
  • La vida sexual se convierte en insatisfactoria, escasa y muchas veces no deseada.
  • Tienes que estar todo el rato dando ejemplos para mostrar tu valía: “mira que buena cena he preparado”, “te he preparado la ropa como a ti te gusta “, ”he dejado de hablarme con mi amig@ como me dijiste, ¿ves que valiente soy?”.
  • No te sientes respetad@ en tus emociones, sentimientos, deseos o ideas. Comentarios como “vaya tontería que te sientas así”, “menuda chorrada de idea has tenido”, “me da igual que quieras ir a la playa, vamos a ir a la montaña”, «yo sé que es lo mejor para ti».
  • Tienes la percepción constante de que algo no funciona.
  • Aunque en principio tienes compañía la sensación de soledad es bastante profunda.
  • Preguntas absolutamente todo y organizas todo tu tiempo en torno a esa persona.
  • Evitas comentarios, actitudes o pensamientos para que la otra persona no se enfade o se entristezca: “no me puedo creer que me hayas dicho que vas a quedar con tu amigo, me estas haciendo sentir muchos celos”, “¿te parece normal que no me hayas cogido el teléfono cuando te he llamado?”, “es que no me quieres nada si lo haces”, ”cada vez que te pones esa ropa me haces sentir molest@”.
  • Tienes la sensación de que hagas lo que hagas nada esta bien. Parece que nunca recibes un comentario positivo y que te equivocas continuamente.
  • Sientes que “te has perdido”. No recuerdas casi como eras antes. Las cosas que te gustaba hacer ya no las haces. La gente con la que te encantaba estar ya nunca la ves. Lo mas curioso es que probablemente ni siquiera sabes por qué.

Una relación de pareja disfuncional (tóxica si queremos ponerle este adjetivo tan utilizado) es una relación que no solo no funciona sino que además te va destrozando poco a poco. Lo que empezó siendo un deseo se sentirte querid@, acompañad@, cuidad@ se convierte en absolutamente todo lo contrario y como dije al principio, si hay sufrimiento no es amor.

Pero ¿por qué nos cuesta tanto dejar una relación así?

Hay muchas razones por las cuales nos mantenemos en este tipo de relaciones. Nuestra historia de vida nos va a dar muchas pistas sobre ello. Cuando empezamos a reconocer patrones y a entender por qué nos quedamos en estas relaciones estamos ante el comienzo del cambio. Veamos algunas de ellas:

  • Baja autoestima: Muchas veces creemos que nadie va a querernos o que incluso no merecemos un buen amor. Esto hace que nos agarremos a la persona que nos haga caso y que nos conformemos con lo que nos dé. Esto es muy problemático porque hay personas que “huelen” esto y les encaja perfectamente alguien a quien puedan manejar a su antojo.
  • Miedo a la soledad: Cuando venimos de historias de vida donde la soledad ha sido un continuo¿sufrir por amor? podemos tener un tremendo miedo a seguir en ella. Perdidas familiares tempranas, cuidadores no disponibles, nos puede haber hecho sentir una soledad muy profunda y una inmensa necesidad de compañía. Solo recuerda una cosa: me estas leyendo ¿no? pues tu soledad te ha permitido llegar hasta aquí, que lo sepas (no has necesitado de nadie para estar en esta web, leyendo este artículo).
  • Necesitar ser los salvadores: Muchas veces sentimos una gran pena por algunas personas y decidimos que nosotr@s, que somos todopoderos@s, vamos a salvar a esa persona dándoles todo aquello que no han tenido o que creemos nosotr@s que necesitan. Esta trampa es peligrosísima. Recuerda que cada persona es responsable de su vida y ni tu ni nadie está en esta vida para salvar  la de nadie. Puedes acompañar, pero no salvar. Si te colocas en este estado la otra persona se volverá “un/a niñ@” y utilizará la tristeza y la rabia a su antojo para recibir exclusivamente lo que desea.
  • Necesitar ser salvados: Otra gran trampa. Considerar que solo otra persona puede cubrir lo que necesitamos o queremos. Sentir que solo la otra persona sabe hacer las cosas o sabe divertirse o tiene los conocimientos. Al igual que decía que no venimos a salvar a nadie tampoco nadie esta para salvarnos. Hacer esto es dejar nuestra vida a la disposición y decisión del otro y eso es jugársela demasiado.
  • Miedo a que lo que venga sea peor: Siempre que alguien me dice “¿y si la siguiente persona es peor?” yo respondo “¿y si no?”. Desde luego que si no cambio cosas en mi la siguiente persona será igual o peor. Pero si aprendo de esa relación, entiendo el porque me he mantenido en ella y trabajo en mi por supuesto que la siguiente persona será mejor, e incluso puede que ni quieras una siguiente persona.

Si leyendo este articulo te has sentido idetificad@, por favor, abre los ojos. El amor es una elección y como tal debe ser algo que nos sume y no que nos reste. Si tu relación te está haciendo sentir mal, simplemente, no es la adecuada. Cuanto antes salgamos de este tipo de relaciones mejor estaremos.

Observa bien cómo te sientes, qué es lo que necesitas y mira si eres capaz de modificarlo. Si no te ves capaz de salir de la relación busca ayuda en tu gente y sobre todo en los expertos en salud mental que podremos ayudarte a identificar no solo lo que te sucede ahora sino el por qué te sucede. De esta forma podremos evitar volver a caer en una relación disfuncional (tóxica)

Recuerda: SÍ, se puede amar sin sufrir.

amor sano

Escribe un comentario